Simplemente no te quiere
Es terrible
confirmar que alguien no te quiere. Es patético y triste sentirte lo suficientemente
buena pero incapaz de generar en el otro un afecto genuino que no sea solo el
fruto de ser “buena persona” y que el otro se sienta como obligado a tenerte
afecto porque es políticamente correcto llevarse bien y apreciar a la gente
buena. No importa que te considere el amor de su vida o su mejor amiga, es esa
sensación de saber que vos sí querés a esa persona por sus cualidades y
defectos, y el otro solo te tiene un cariño tibio. Hasta sabés que si te
quisiera sería una gran relación, pero no… simplemente no te quiere. Te
aprecia, te valora, se divierte… pero no extraña, no te tiene presente, no te
necesita, no necesita comunicarse con vos y sabés que si un día desaparecés te
vas a perder en la bruma de su memoria. No dejaste marca ni huella, solo una
sonrisa tibia de vez en cuando, algo grisáceo, agradable pero no memorable. Y eso
es sinceramente deprimente. Triste. No estás esperando que retribuya tu cariño
con grandes gestos y menos que lo haga por obligación moral. Estás esperando un
simple gesto que te diga que el afecto es medianamente reciproco y no que solo
sos “una buena chica” que se le cruzó en el camino. Pero lo peor es saber que
no podés hacer nada al respecto, que no hay forma de modificar los sentimientos
ajenos, que no hay nada que puedas hacer para cambiar eso más que salir a
manipular los sentimientos ajenos haciéndote tan necesaria o haciendo sentir
tanta culpa que te da hasta asco la sola idea de tener alguien atado porque sos
consciente de lo que hiciste. No sos capaz de creerte la mentira de autoconvencerse
de que si lo harias sería ganancia porque sabés que un día te vas a levantar
sin ganas de seguirle el tren al personaje que te inventaste para que esa
persona no se fuera lejos. Ves que eso es lo que pasa a tu alrededor y sabés
que muchos lo hacen con vos, pero no importa porque para vos lo que sentis es
genuino, verdadero mientras dure. Pero vos sos vos y el otro no siente lo
mismo. Y te lo dice a cada paso, con cada olvido, con cada gesto de desprecio
hacia tu persona, con cada descuido, con cada maltrato solapado que simplemente
no puede quererte como es capaz de querer a otras personas. Y quizás esa
persona es tan buena como vos, como vos que tampoco sos capaz de sacarte de
encima a alguien que es una gran persona pero que no te genera un gran afecto y
no le das bola. Y es más triste aún. Te sentís impotente. Y ahora que lo sabés
mejor entendés que quizás no quisiste verlo, que era mejor no haberte enterado
y haber seguido en tu ceguera. Pero no… porque hasta ayer no sabias porque te
hacia sentir tan mal que esa persona no te demostrara afecto pero ahora ya sabés
que no puede, quizás hasta quiere, pero no le sale quererte… y andá a saber
porque es. Y mañana vas a empezar a entender que al final fue mejor la verdad
que lamentarte por que no te puede querer aunque quisiera y vas a ver que te
sacaste una mochila de la espalda y que quizás, esos que si están esperando que
los ames están ahí, sentados a tu lado, tan cerca desde siempre que no los
viste. No tengo idea por qué se nos da por querer a gente que no nos quiere,
por qué queremos amar a gente incapaz de amarnos. Sin afecto las relaciones se
desequilibran y duelen. Aún creo que la verdad libera y que la mentira ata. Ser
libre tiene un precio alto y mentir (o mentirse) siempre es más fácil.
De todos modos creo que hay gente
que se hace querer, que defiende lo que siente y te gana el afecto. No creo ser
una de esas. Me doy por vencida ahora. Si alguien simplemente no me quiere
¿para qué insistir?
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